Los seres humanos somos capaces de producir una gran variedad de textos orales y escritos, en los que podemos reconocer unas estructuras que responden a unos esquemas conocidos como tipos de textos. Es el emisor quien produce un tipo de texto determinado, según su intención. Cuando el destinatario recibe el texto intenta reconocerlo como perteneciente a un tipo de texto. Nos fijaremos para ello en la estructura, en el uso de los verbos, en la abundancia de adjetivos en la presencia de conectores, etc.
Unos de los que más nos confunden son los textos expositivos y los argumentativos. En esta entrada del blog ¡tenemos la solución!, aquí podemos encontrar un esquema que nos resuelven estas dudas, dándonos tanto las diferencias como las semejanzas entre estos dos tipos de textos, para así poder diferenciarlos mejor.
Le falta la tilde a "vídeo".
ResponderEliminarHay un error en la infografía. Los textos expositivos son objetivos, no subjetivos.